Se dice de mí
En esta entrega del Sueño vamos a tratar de revisitar la figura y trayectoria de una de los máximos íconos de nuestra riquísima cultural nacional, hablamos, nada más ni nada menos, que de Laura Ana Merello, Tita Merello.
La infancia del pobre
Tita Merello nació un 11 de octubre de 1904 en un conventillo de San Telmo ubicado en la calle Defensa. Sufrió la orfandad de su padre a los 4 meses, motivo por el cual pasa una niñez de carencias y pobreza. Su madre no pudo mantenerla y la interna en un orfanato. Recién vuelve al conventillo a los 12 años.
"Tuve una infancia muy breve. La infancia del pobre siempre es más corta que la del rico", dijo alguna vez.
A los 13 años comienza a trabajar en una zarzuela del Teatro Avenida, luego se presentó como corista en el teatro Bataclan ubicado en la calle 25 de Mayo frecuentado por marineros. Allí comienza a observar ávidamente las actuaciones de otros artistas y de esta manera empieza a adquirir sus primeros aprendizajes en el mundo del espectáculo. El trabajo en el Bataclan consumía muchas horas de sus días en el escenario. En este ambiente de los bajos fondos, casi rayando la prostitución, se empieza a forjar la leyenda.
Teatro Bataclan
No supo leer y escribir hasta los años 20, detalle que no le impidió abrirse camino en ese mundo, es ahí donde comienza a forjar el ímpetu que la caracterizaba. Eduardo Borrás, redactor del diario La Nación, fue quien la instruyó en la escritura y la lectura. Borràs solía decir: "Es terca, muy terca. A veces ella parecía la maestra y yo el alumno. Y no se podía rendir ante la evidencia de que era yo quien enseñaba, ¡es que siempre quería saberlo todo!”
Llegada al Maipo
En 1924 debuta en el teatro Maipo donde canta su primer tango: Trago Amargo.
El carisma innato que traía consigo fue la clave para su éxito. Su forma de hablar canyengue, su autenticidad, su carácter extrovertido y su soltura para decir lo que pensaba en escena la hicieron sobresalir del resto. Descollaba con gestos que completaban sus performances, de esta manera fue ganando un lugar privilegiado en los teatros de la calle Corrientes.
"Canto con el mismo tono de hace 40 años. ¿Yo imposte la voz? No. ¿Yo aprendí canto? No. ¿Yo fui a estudiar arte dramático? No. El arte dramático está en la calle Corrientes, angosta, cuando caminás toda una noche sin tener donde ir a dormir. Ahí se aprende el drama. Ahí se aprenden las pausas, el tono. En la oración y la desesperanza, se aprende", sentencia Tita.
Luego del éxito en los teatros reemplazó a Olinda Bozán con el protagónico de la película El rancho del hermano con mucho éxito.
Su debut en el cine
Su primera actuación en cine quedó registrada en ¡Tango! de 1933. Esta fue la primera película sonora argentina, por la cual recibió 200 pesos por cinco días de filmación. Por contrato, ella y los demás actores del elenco, (Alicia Vignoli, Alberto Gómez, Carmencita Calderón y Luis Sandrini), debían aparecer en los créditos debajo de Libertad Lamarque, la protagonista principal.
La Morocha había firmado el contrato con Argentina Sono Film el 21 de octubre de 1932 y las tareas de rodaje implicaban la presencia de los actores durante seis horas en el estudio. El filme se iniciaba con la presentación de la cantante Azucena Maizani, a pesar de que no volvió a aparecer en el resto de la película, para luego dar lugar a las orquestas de Osvaldo Fresedo, Edgardo Donato, Pedro Maffia, Juan de Dios Filiberto y el dúo Ponzio-Bazán. También significó el debut cinematográfico de Luis Sandrini, (posteriormente pareja de Merello), que tampoco tuvo un lugar destacado dentro del reparto.
Actuó en varias películas hasta su consagración como actriz dramática en la película La fuga de 1937 dirigida por el director Luis Saslavsky.
Afiche promocional de Los isleros de Luca Demare, 1951
La persecución de La Libertadora
Producido en golpe de Estado a Juan Domingo Perón, presidente elegido democráticamente, la llamada Revolución Libertadora utilizó todos sus recursos para perseguir a los artistas asociados al peronismo.
Tita Merello fue investigada por contrabando de Té desde Sri Lanka por una Comisión Investigadora. La persecución y la censura provocaron que muchos artistas se exiliaran. El Estado deja de subsidiar al cine provocando que muchos se quedaran sin trabajo.
Tita se exilió en México pero la productora de su amigo Negrete quedó en la bancarrota. Sin trabajo hizo todo lo posible para volver al país pero había restricciones. Tita tenía una foto saludando a Juan D. Perón en 1954 en el Festival de Mar del Plata motivo suficiente para que La Libertadora la tuviera en la mira. Regresó a la Argentina en 1958 luego de que Frondizi ganara las elecciones.
Tita hizo una carrera brillante en el teatro, en cine y TV. Estos trabajos no alcanzaron para derrotar la soledad y tristeza de sus últimos días. Recluida, deprimida y alejada de todos había encontrado consuelo en la fe. Se la recuerda en programas de televisión donde rememoraba su vida, daba consejos para la mujer y hablaba de Dios. Falleció a los 98 años un 24 de diciembre de 2002 en la Fundación Favaloro.
Mural de Tita Merello Estación de subte Corrientes Línea H
El gran legado de Tita
Diva absoluta de la calle Corrientes, de talento natural y un empoderamiento capaz de arrasarlo todo con ese aire arrabalero, nos dejó un legado extenso de su impronta artística.
La mejor biopic de Tita Merello es el excelente trabajo realizado por Mercedes Funes en la película Yo soy así, Tita de Buenos Aires que podes ver gratis en la plataforma de Cine Nacional Cine.ar play lo único que tenés que hacer es registrarte para poder acceder al contenido on line.
Mercedes Funes como Tita Merello
Filmó más de 30 películas entre los años 1933 y 1985, en su mayoría del género dramático. La mayoría de estos trabajos lograron un destacado éxito de taquilla.
Te dejo los mejores 15 títulos:
Tango! (1933); Noches de Buenos Aires (1935); Cenizas al viento(1942); Don Juan Tenorio (1948); Filomena Marturano (1950); Arrabalera(1950); Los Isleros (1951); Vivir un instante (1951); Pasó en mi barrio(1951); Deshonra (1952); Mercado de Abasto(1955); Para vestir Santos (1955); El amor nunca muere (1955); La Morocha (1955), estrenada en 1958); La Madre María(1974).
Hacer click en los títulos para ver película completa y maratonear hasta salir cantado tangos.
Y termino la nota con el tema del título y que es la música que daba inicio a cada capítulo de la exitosa novela colombiana Betty, la fea.
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